TAMPA, Florida, EE.UU. — El abridor zurdo de los Medias Rojas Chris Sale sufre molestias en su codo de lanzar y se sometió a una resonancia magnética.
El manager Ron Roenicke informó el martes que Sale sintió molestias el lunes, un día después de lanzar en una práctica de bateo.“Obviamente estamos preocupados”, dijo Roenicke.
El doctor James Andrews examinará la resonancia.
Sale efectuó 18 pitcheos en la práctica del domingo, la primera vez que enfrentó bateadores desde que permitió cinco carreras en 6 2/3 innings en una victoria en Cleveland el 13 de agosto. Fue colocado en la lista de lesionados por una inflamación del codo, cerrando su campaña con marca de 6-11 y efectividad de 4.40 en 25 aperturas.
Desde 2012, el lanzador no había tenido tan pocas victorias y aperturas. Su efectividad fue también la peor que ha registrado desde entonces.
Sin embargo, Sale evitó la cirugía en el codo. En vez de ello, se le aplicaron inyecciones de plasma rico en plaquetas durante los últimos meses de 2019.
“Hay cierta preocupación, sabiendo cómo transcurrió su temporada de 2019 y lo importante que es él para nosotros”, comentó el jefe de operaciones deportivas de Boston, Chaim Bloom. “Pero sabemos también que, en el camino a la recuperación, cuando llegas a ciertos puntos, a veces puedes sentir dolor”.
Sale iba a iniciar esta campaña en la lista de lesionados tras presentarse al campamento de pretemporada con neumonía, lo que retrasó dos semanas su preparación.
La nueva dolencia nubla más el panorama de la rotación de abridores de Boston.
Los Medias Rojas tienen dos vacantes en la rotación para el día inaugural de la campana, ante la ausencia de Sale y tras ceder a David Price en un canje con los Dodgers de Los Ángeles, que se hicieron también del jardinero estelar Mookie Betts.
Sale, quien cumple 31 años el 30 de marzo, está comenzando el primer año de un acuerdo por cinco temporadas y 145 millones de dólares que firmó durante la pretemporada anterior.
Cumplirá su tercera estadía en la lista de los lesionados desde que Boston lo adquirió antes de la campaña de 2017. Se perdió también un mes cerca del final de la campaña de 2018, antes de volver y ayudar a que el equipo conquistara la Serie Mundial de ese año
