Creado por: Héctor Gómez
A propósito del interesante debate generado en Z Deportes sobre quién ha sido el mejor lanzador dominicano de todos los tiempos en las Grandes Ligas, trataremos de aquilatar en su justo contexto la labor desarrollada por estos dos virtuosos del pitcheo nacidos en la patria de Duarte, Sánchez y Mella.
Mucho se ha comentado a través de los diferentes medios nacionales sobre quien ha sido el mejor lanzador dominicano de todos los tiempos en Grandes Ligas.
Fundamentalmente, el debate se limita a dos virtuosos del montículo: Juan Marichal y Pedro Martínez.
Marichal y Pedro son miembros del Salón de la Fama de Cooperstown y del pabellón de la fama dominicano.
¿Quien tuvo mejor carrera entre el monstruo de Laguna Verde o Pedro el Grande?
De manera general observamos una tendencia en los aficionados. Los de mayor edad, que tuvieron la oportunidad de ver a Marichal lanzar en su época dorada, se inclinan por el montecristeño. En cambio, los más jóvenes tienden a alinearse con el monstruo de Manoguayabo.
Juan Marichal supera a Pedro Martínez en triunfos, efectividad, innings lanzados, juegos completos y blanqueadas. Pedro, por su parte, supera a Marichal en cantidad de temporadas, en ponches y premios Cy Young.
Lo primordial al comparar jugadores de diferentes épocas es medir su contribución dentro del contexto histórico correspondiente.
Considerando como ha evolucionado el béisbol a través de los años, es un contra sentido comparar números absolutos entre jugadores de diferentes épocas. Sencillamente no es justo, ni lógico realizar comparaciones de este tipo.
Simplemente no es lo mismo un lanzador con efectividad de 2.10 en 1960 — cuando el promedio de la liga era de 3.81 — que en el 2007 cuando ese promedio se había elevado a 4.47. La efectividad es la misma, pero claramente el segundo lanzador ha sido más dominante que el primero.
Entre las transformaciones más impactantes del juego cabe destacar la llegada de una pelota más viva, bates de mejor calidad, parques más pequeños, regímenes de preparación física y mental avanzados, sustancias para mejorar el rendimiento, entre otros.
Por tanto es esencial al realizar la comparación tomar en cuenta la época, el parque, galardones obtenidos y juegos de estrellas. Entendemos es clave ponderar el dominio de cada lanzador sobre sus contemporáneos. Es la mejor forma de realizar una comparación justa.
Ciertamente la competencia está bien cerrada. Veamos.
Al considerar el dominio de cada lanzador en su época, tomando como base una métrica normalizada como ERA+, Pedro aventaja a Marichal. Esta estadística indica que Martínez fue un 54% superior a sus homólogos, mientras el dominican dandy un 23%.