El equipo nacional femenino de República Dominicana está listo para regresar a los Juegos Olímpicos este verano en Tokio y su principal meta es avanzar a los cuatros de finales dentro de su grupo.
Quien así se expresa es el técnico del equipo de la República Dominicana, Marcos Kwiet, en una entrevista para el portal oficial de la FIVB.
«Nuestro primer y principal objetivo es avanzar a los cuartos de final», dijo el entrenador en jefe Marcos Kwiek. “Si no lo hacemos, lo consideraríamos un fracaso. Estar en los Juegos Olímpicos ya es un gran logro para nosotros, pero ahora estamos buscando el siguiente paso y me gustan nuestras posibilidades de salir de nuestro grupo «.
Y agregó el técnico del equipo dominicano: «En teoría, nuestros partidos clave deberían ser Japón, Corea y Kenia», dijo Kwiek. «Creemos que Serbia y Brasil están probablemente en un nivel más alto ya que han terminado consistentemente entre los mejores en los torneos principales y, si no sucede nada sorprendente, deberían ser los números uno y dos en el grupo». Eso significa que los otros cuatro equipos competirán por los dos lugares restantes, por lo que los partidos contra ellos probablemente decidirán nuestro destino «.
Las dominicanas estarán en el Grupo A en el torneo olímpico junto a Serbia, Brasil, Kenia, Corea y Japón, y con cuatro de los seis equipos avanzando a la ronda de eliminación, su estrategia para avanzar es muy clara.
De cara a sus terceros Juegos Olímpicos, las dominicanas tienen un quinto lugar en Londres 2012 como su mejor desempeño hasta la fecha. El resultado obtenido por ese equipo, que incluía a jugadores que aún forman parte de la lista actual, como las atacantes externas Bethania de la Cruz y Prisilla Rivera, la bloqueadora central Lisvel Eve y la estrella libero Brenda Castillo, se considera el punto de partida para el equipo en 2020.
Con los actuales campeones mundiales Serbia y Brasil, que ocupan el tercer lugar en el mundo, lo más probable es que presenten desafíos difíciles para el equipo caribeño en el noveno puesto, su enfoque está en ganar sus otros tres partidos de grupo para que no dependan de un resultado positivo contra los europeos o los sudamericanos, que serán sus dos primeros oponentes en Tokio.
En línea con su estrategia, los enfrentamientos con Corea, el 30 de julio, Kenia, el 1 de agosto, y Japón, el 3 de agosto, tendrán un impacto fundamental en las aspiraciones del equipo en la capital japonesa dentro de unos meses.
Sin embargo, si sus resultados durante la temporada 2019 se toman como una indicación de cuán lejos pueden llegar los dominicanos en Tokio, probablemente podrían apuntar aún más alto. En el transcurso de la última temporada internacional, el equipo, que se aseguró su lugar olímpico al ganar el clasificatorio NORCECA en enero pasado, derrotó a todos sus oponentes del grupo en Tokio, así como a otros equipos importantes del mundo como Estados Unidos y Rusia.
«El año pasado fue muy positivo para nosotros, pero no solo por los resultados», agregó el entrenador. “Era muy importante que fuéramos sólidos y consistentes durante toda la temporada. Obviamente, los resultados validan el trabajo que hemos estado haciendo aquí, pero alcanzar ese nivel de consistencia significa mucho. Queremos mantener esa forma en 2020 para poder ir a Tokio con grandes esperanzas «.
